Llegó el momento de la felicitación navideña. Para mí es algo más que enviarte buenos deseos. Es dedicarle tiempo a pensarla, redactarla y animarla. Lo hago porque me entusiasman estas fechas. ¡Yo voy a por el 2018!
Se acaba el año y hacemos balance recordando lo vivido. Si tuviera que resumir el año con una palabra sería adiós. Mi padre falleció. No diré que nos dejó porque luchó para no hacerlo mientras tuvo aliento. No, no nos dejó por todo lo que nos dio. Mis recuerdos y momentos con él son míos para siempre.
Un año más vieja o con más experiencia, como quieras verlo, pero un año viva, un año nuevo por delante y más cosas por hacer.
En la felicitación tú verás una bola de nieve en lo que para mí es una muestra de amistad y cariño.
Espero que te guste.